EL PROYECTO DE ‘OPCIÓN
TRANSPARENCIA’ COMO PLANTEAMIENTO DE UN NUEVO FIN COMÚN
OPCIÓN TRANSPARENCIA
es una red de personas y organizaciones, así como un
movimiento que aspira a la
vinculación definitiva entre lo
espiritual y lo temporal. Sin embargo, y sin que sea
demasiado difícil reconocerlo, esta aspiración constituye ya,
por sí misma, un planteamiento espiritual.
Si logramos tomar, por fin, lo temporal como terreno de acción
de lo espiritual, hay que concebir, asimismo, a lo temporal como
integrado en un todo unitario, y nunca como compuesto de partes
aisladas unas de otras. Con esto se quiere decir que no se puede
pretender actuar bienintencionadamente en un terreno descuidando el
resto del entramado, que continuará, en lo esencial, incólume,
generando, por tanto, nuevos conflictos y contradicciones. Se trata
ya, pues, de que no sea necesaria la caridad, por así decirlo,
procurando restaurar partes que consideramos dañadas o de paliar
desgarros de uno u otro tipo, sino de actuar lo
más globalmente posible. En una palabra: hay que ir,
de una vez y definitivamente, a por todas.
Uno de los requisitos para ello es realizar lo que decimos: actuar
en todos los niveles e instancias y ello con inequívoca vocación
expansiva y universalista. Se trata, pues, de definir un nuevo fin
que vincule a millones de personas en todo el mundo. Ese fin no es
otro que la restauración de una nueva Utopía,
entendida ésta como la representación ideal que busca una forma de
organización social en la que el ser humano encuentre la armonía
consigo mismo y con la naturaleza.
Para el logro de relaciones armónicas de los seres humanos entre sí
resulta requisito indispensable que la
afirmación de la singularidad de cada uno sea la condición de la
afirmación de la singularidad de todos los demás. En
otras palabras: que nuestra libertad no sea un tope o un límite para
la afirmación de la libertad de los demás, sino su condición; y
viceversa. Dejamos de concebir, pues, la libertad en el sentido
confinado burgués (“mi libertad termina donde comienza la tuya”)
para plantear un nuevo sentido de la libertad: la
libertad solidaria,
verdadera expresión de la singularidad humana.
Así, pues, hay que trabajar por acabar con todo aquello que limite
o agoste esta singularidad, expresión misma de su libertad. Es
decir, con todo aquello que no considere al ser humano un fin
en sí mismo, tomándolo, por el contrario, como un medio. Y
sáquense todas las conclusiones posibles de esto. Así pues, sólo
podrá considerarse inocente una sociedad en la que los seres humanos
no sean tomados como medios, sino como fines en sí mismos.
Se trata, pues, de construir, una economía, una política, unas
instituciones y unas relaciones humanas desde la inocencia. Y
debe ser ella la que dé cuerpo a las leyes, y no por las leyes -hoy
culpables- por las que se valore la inocencia o culpabilidad de las
personas, las prácticas o las instituciones.
Se hace, pues, urgente definir un lenguaje propio que nos
desmarque nítidamente del sistema que acaba asimilándonos una y
otra vez. Queremos ser disidentes reales, no ficticios, empleados
para renovar, con su supuesta apertura, la propia legitimidad del
sistema. Nuestra aspiración esencial es que debe ser la
identidad humana en tanto que espíritu (singularidad solidaria) el
nuevo patrón de referencia de toda institución social.
Nuestra labor -la de todos- es la de dignificar al
ser humano -hoy convertido en mero detritus en la conciencia
colectiva- tomándolo como lo que realmente es: una forma esencial de
ser en el mundo. Y, al contrario de lo que se piensa,
es la propia autoestima -que no significa prepotencia ni egolatría-
la que lleva a desarrollar la valoración y el
cuidado por las otras formas de vida, concebidas
asimismo como singularidades necesarias.
Aspiramos seria y decididamente a poner en marcha y ampliar este
movimiento que nace en una acción coordinada en función de un plan.
Cada persona que voluntariamente se sume podrá trabajar para tomar
contacto con otras que a su vez puedan irse sumando en torno a unos
principios comunes. Son estos los medios para tener presencia activa
en muchos sitios: la creación de focos de irradiación que, a su
vez, den lugar a nuevos focos.
Excelente iniciativa.
ResponderEliminarMe sumo a ella.
Olga
Eres muy bienvenida, Olga. Nos alegramos de verte por aquí. Te tendremos informada de todo. Estamos en contacto.
EliminarUn abrazo muy fraternal.
Rosa